Esta presión por parte de mí familia, hizo que me preguntara: ¿Debo estudiar en una universidad que, aunque no cuente con la carrera que quiero, esté cerca de mi hogar? ¿Habrá alguna otra opción que me permita estudiar sin necesidad de alejarme de la comodidad de mi casa? ¿Seré capaz de enfrentar las pruebas que me presenten las universidades a las que aspiro pasar?

Con estas preguntas dando vueltas y vueltas en mi cabeza, me presenté en la UdeA, la UNAL y la Universidad de Cartagena, (Universidades que contaban con la carrera que me gustaba y que estaban relativamente cerca de familiares a los cuales podría acudir en caso de algún imprevisto). Sin embargo, mis resultados no fueron buenos, y por consiguiente, no fui admitido en ninguna de ellas.

Fue un momento muy doloroso, y que marcaría un antes y un después en mí vida. Tanto esfuerzo, dedicación, horas de súplica, muchas esperanzas… ese anhelo que tenía de ser admitido y enorgullecer a mi familia… no sirvió de nada.

Pasaron dos meses desde aquel momento significativo. Meses en los que me la pasé buscando instituciones que me permitieran desarrollar alguna técnica, para de ese modo, no quedarme sin estudiar. Y cuando daba por perdido ese sueño de estudiar una carrera profesional, llegó a mii vida la IU Digital de Antioquia.

Esta universidad, además de permitirme estudiar una carrera profesional, me ha dotado de mucha motivación y herramientas para sacar mis estudios adelante, como la implementación de módulos virtuales y el acceso a los espacios físicos con los que cuenta la institución, en caso de querer afianzar mucho más mis conocimientos.